Claro que tienes un cuerpo, y sí claro, tienes la última decisión en todo lo que haces, por ejemplo puedes decidir ahorita buscar un excremento de animal recién hecho y comerlo, si así lo decidieras. El tema es que el bebé tiene otro cuerpo distinto, es un ser humano nuevo, que tiene los mismos derechos a la vida y a no ser asesinado, igual que tú. Sí pudiera ser incómodo prestarle tu cuerpo durante 9 meses para que nazca, y luego si no quieres hacerte cargo de él, darlo en adopción.
Más incómodo va a ser que lo mates, y luego te arrepientas y ya no puedes dar reversa al homicidio, como la mayoría de las madres que han tomado esta decisión, ya que luego se arrepienten años más tarde y se imaginan qué edad tendría su hijo, durante toda su vida.
El aborto puede tener consecuencias físicas y emocionales negativas para la mujer como complicaciones médicas o problemas psicológicos a largo plazo. También se argumenta que el aborto puede cambiar la percepción de la vida humana desensibilizando a la sociedad y debilitando el valor de la vida en general. Por lo que se tiene que reconsiderar esa decisión debido a que todos tienen derecho a la vida.
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Es mi cuerpo y yo decido, con todas las consecuencias que ésto va a conllevar supongo, saber que quité una vida tal vez por un precio de dinero que no podía pagar o por no pasar una verguenza. Creo que si pudiéramos adelantarnos 10 años al aborto «es mi cuerpo yo decido» es una excusa que usé en el pasado por pena o dinero, cuando hay asociaciones que toman tu hijo para darlo en adopción, cuando hasta acojen a la madre durante todo el embarazo y la mantienen, le enseñan un oficio, ayudan a sacarla adelante. Siempre hay opciones, matar a un niño no debería ser opción.